lunes, 17 de mayo de 2010

Merluza con pimientos del piquillo y tomate

Ingredientes
(4 personas)

200 gramos de pimiento del piquillo.
4 filetes de merluza.
Salsa de tomate.
1 decilitro de aceite de oliva.
Sal.

Cortamos en tiras pequeñas los pimientos del piquillo.
Untamos con aceite los filetes de merluza y espolvoreamos ligeramente con sal.
Colocamos los pimientos encima de los filetes de merluza, los salseamos ligeramente y los introducimos en el horno microondas durante 5 minutos al 60% de la potencia máxima.
Sacamos del microondas y dejamos reposar durante unos minutos. En ese tiempo, aprovechamos para calentar el resto de la salsa de tomate en el microondas (tapado)

Servimos caliente y acompañando con salsa de tomate caliente.

Sopa de zanahoria

Ingredientes (4 personas)
500 gramos de zanahorias.
100 gramos de cebolla.
1 hoja de laurel.
100 gramos de fideos para sopa. (se pueden eliminar)
4 cucharadas de aceite
Sal.

Elaboración:
Raspamos y lavamos bien las zanahorias y las troceamos en rodajas.
Picamos la cebolla y la sofreímos en el aceite dentro de una cazuela.
Una vez sofrita, añadimos la zanahoria troceada y una hoja de laurel.
Cubrimos con agua y dejamos cocer durante 30 minutos.
Cuando esté blanda la zanahoria la pasamos por la batidora hasta formar una sopa.
Sazonamos esta sopa y añadimos los fideos y si fuese necesario un poco más de agua para cocerlos.
Servir caliente.

El gomasio como condimento nutritivo. Consumer Eroski

Esta mezcla de semillas de sésamo y sal marina se convierte en un condimento sabroso y remineralizante en ensaladas, verduras, cereales y legumbres

El gomasio, también conocido como sal de sésamo, constituye un excelente condimento para usar de forma cotidiana en la cocina. Sirve para salar los alimentos, a los que también aporta un delicioso sabor a fruto seco y los enriquece en minerales, ácidos grasos insaturados cardiosaludables, lecitina, vitaminas y proteínas. Las semillas de sésamo contienen un 20% de proteína, una cantidad semejante al resto de frutos secos, y más calcio que la leche a igualdad de peso (150 mg frente a 115-120 mg). En proporción, su aporte energético es muy superior, ya que un 50% de su contenido es grasa, sobre todo, insaturada.

Condimento remineralizante.

La naturaleza proporciona a las semillas de sésamo una cantidad relevante de antioxidante, la vitamina E (2,3 mg/100 g), que actúa como conservante en la semilla al evitar que la grasa se oxide y adquiera un sabor rancio. Además, el gomasio es un concentrado de más nutrientes reguladores, como el ácido fólico (96 microgramos/100 g), la niacina o B3 (4,5 mg/100 g), el potasio (450 mg/100 g), el magnesio (350 mg/100 g), el fósforo (620 mg/100 g) y el hierro (9 mg/100 g). Al tener un tamaño tan pequeño y ser difícil de masticar, se recomienda machacarlas en un mortero antes de consumir y aprovechar así mejor sus valiosos componentes nutritivos.

La mezcla de las semillas de sésamo tostado con sal marina da lugar al gomasio. El proceso de tostado facilita la conversión del compuesto químico sesamolín en sesamol. Este último es un antioxidante potente, un aspecto que le confiere el interés nutricional. Además, la concentración de minerales del sésamo hace del gomasio un condimento remineralizante. Por ello, la costumbre de añadir unas cucharaditas a las ensaladas, las verduras, las cremas vegetales, las sopas y los platos de cereales es una buena idea para aportar calcio a la dieta. Más todavía si no se tiene costumbre de tomar leche y derivados.
Del sabor a lo nutritivo y saludable

Las distintas civilizaciones han usado siempre las semillas como fuente de energía y de nutrientes. En cuanto a las semillas de sésamo, conocidas también con el nombre de ajonjolí, fueron los árabes quienes las introdujeron en la península ibérica. La importancia que se les ha otorgado en la historia se confirma por el análisis científico de sus propiedades:
* El gomasio es un buen aporte complementario de proteínas. Su combinación con cereales aumenta el valor biológico de éstas, tal y como sucede al untar el pan con tahini o al añadir gomasio a las ensaladas de pasta, arroz o vegetales si se come pan en la comida.
* Es fácil de digerir, siempre y cuando la cantidad que se consuma no sea excesiva, puesto que es un condimento concentrado de grasas.
* Ayuda a tener una buena circulación sanguínea ya que proporciona al organismo ácidos grasos insaturados cardiosaludables.
* Es un condimento remineralizante por su concentración de sales, en particular, por el calcio.
* Ayuda a regular el tránsito intestinal porque aporta fibra, nutriente con funciones laxantes.

Con el sésamo se elaboran otros productos sabrosos y nutritivos como el tahini, una pasta untuosa y grasa muy energética, y el aceite. El contenido del aceite en sesamol, un compuesto antioxidante natural, hace que éste sea más estable a la oxidación y, por tanto, de mayor calidad culinaria y nutricional que el resto de aceites de semillas (girasol, maíz, soja) para su uso en caliente.
ELABORACIÓN CASERA

La preparación de las semillas de sésamo en casa es sencilla y rápida. Es más apropiado comprarlas crudas (naturales), limpiarlas para eliminar las impurezas que puedan tener y tostarlas ligeramente antes de consumirlas. Para limpiarlas, se esparcen en un plato, se retiran los restos de arenilla o pequeñas piedras y se pasan por agua en un colador para eliminar el polvo. A continuación, se escurren y se esparcen para tostarlas en la bandeja del horno o en una sartén, donde resulta más fácil controlar el grado de tueste. Hay que calentar la sartén sin aceite, añadir las semillas y remover de forma constante para que no se quemen.

De este modo, se tuestan a los pocos minutos, aunque se sabe que están en su punto cuando se aplastan sin dificultad con una presión mínima de los dedos y han adquirido un ligero tono marrón. Luego se dejan enfriar durante un breve espacio de tiempo y se mezclan con sal marina en cantidades variables, según se desee el condimento más o menos salado. En general, se agrega una cucharada de sal por cada 10-15 cucharadas de semillas tostadas. Por último, se machacan en el mortero (hay utensilios especiales para realizar esta operación) hasta que la sal se impregne bien con las semillas. El resultado es el gomasio, que debe guardarse en un frasco hermético en perfectas condiciones durante una o dos semanas.

viernes, 14 de mayo de 2010

Evitar las moscas en la cocina

La cocina es uno de los hábitats donde pueden actuar las moscas, por lo que es necesario tomar las medidas oportunas para evitar su proliferación. Las acciones preventivas pasan por una estricta limpieza y el cumplimiento de una serie de pautas:

* Evitar acumular basura y mantener siempre cerrado su contenedor para que las moscas no entren en contacto con ella.
* No almacenar los alimentos al aire sin protección como fruta, dulces, piezas de embutido o jamón curado, además de platos cocinados.
* Cocinar con las ventanas cerradas, sobre todo, si el hogar está cerca de un foco de estos insectos, como un centro de producción ganadera. En estos casos, resulta recomendable instalar mosquiteras en las ventanas.
* Tomar precauciones especiales si se prepara la casa para una ausencia prolongada.
* No dejar platos con restos de alimentos en la cocina y guardar los utensilios limpios (vajilla, cubertería o cristalería) en lugares cerrados, como armarios y cajones, a los que no tengan acceso los insectos.

Métodos de eliminación

Algunos sistemas y mecanismos domésticos para eliminar las moscas pueden ser eficaces, siempre y cuando se evite que caigan sobre los alimentos (como los matamoscas manuales) o que el tratamiento sea tan perjudicial como el problema. Los insecticidas nunca deberán aplicarse sobre alimentos o utensilios de cocina.

* Matamoscas eléctricos. La mayoría están dotados de una luz fluorescente que atrae a las moscas. Éstas se electrocutan en una resistencia y caen a una bandeja recogedora. Carecen de sustancias químicas nocivas. Una novedad en este campo son los repelentes de insectos mediante emisiones de ultrasonidos.
* Insecticidas. Deben estar autorizados para uso doméstico. La aplicación debe seguir las instrucciones del fabricante y sus consejos de seguridad. No se deben utilizar nunca en la cocina mientras se trabaja con alimentos o sobre utensilios. Su aplicación es adecuada tras una limpieza general, sobre todo, si se han detectado indicios de insectos o tras una temporada de inactividad en la cocina.
* Trampas para insectos con sustancias que les atraen hasta sistemas de retención donde pueden entrar, pero no salir. Las cintas adhesivas, de llamativos colores, las atrapan con una potente goma, aunque son poco recomendables en cocinas y comedores, ya que las moscas a menudo se desprenden y caen.
* Las hierbas aromáticas como la albahaca y, sobre todo, las variedades de hoja pequeña, son repelentes de insectos. Resultan apropiadas en el alfeizar de las ventanas en cocinas y comedores.
* Bolsas de plástico transparente llenas de agua colgadas del techo o del dintel de las puertas son algunos sistemas caseros para eliminar moscas e insectos. No hay base científica para obtener tales resultados, pero sus defensores alegan que la gran capacidad visual de las moscas hace que se sientan intimidadas al ver los objetos y los movimientos aumentados a través de las bolsas de agua, que tratarían la imagen como lupas reflectoras.